martes, 20 de septiembre de 2016

Amigos

Amigos es decir aires, brisas, alientos, vientos, ventarrones y huracanes que nos empujan
Es estar perdidos como nunca, para que una conocida mano nos traiga a la tozudez del día
Amigos es decir voltear barreras, disposiciones, posturas, es ser como uno es y como quiera
Se acepta sin devolución la amistad,  como el amor nadie sabe del todo porque elige ser amigo
Pero hay una risa, una virtud,  el imán que un día liberan las almas para no dejar de necesitarnos
A la amistad no le importa el confort, el palacio, la ropa ni el ajuar,  más despojada más pura
Quién no ha amado más a un amigo que a un familiar, compiten con el perro lamiéndonos heridas
Decimos estas cosas porque estamos entre amigos, cuando los corazones andan en calzones
Nos sacamos las fajas, desatamos cordones, aflojamos el cinturón, se nos acaba la máscara
Hay amigos que se fueron y han vuelto, es que el tiempo suele tomarse un tiempo y un respiro
Pero están los que no vuelven, los que se han ido,  un puñal que no cesa es la muerte de un amigo
La vida va quitando todo de a poco, pero quedan los amigos: es el único capital sin vencimiento

Y que orgullo da hacerse viejo y contar con ustedes, mis amigos: mis brisas, mis aires, mis alientos 

miércoles, 14 de septiembre de 2016

Presente

Es un fluído que me corroe
Es un monstruo delicado que nos come de a bocado
Es la belleza manchada con tinta vieja
Es el rencor desvencijado.
Es el amor agusanado. 
Es el andar amortiguado
Es nuestro oficio agerenciado
Es la revolución sin teta
Los pobres sin revuelta
La sociedad careta
Es un tiempo voraz y edulcorado
Soy hermano de mi perra
Y tío de su maceta

sábado, 10 de septiembre de 2016

Apenas

Apenas te toco, apenas te rozo, un disimulado beso premonitorio y de vuelta a casa. Una, a una esquina, el otro, a su calle. Disimulamos todo el tiempo el maldito imán que alguien nos incrustó. Queremos ser olvido otra vez… 
No hay sueño mejor que lo que queda en las puertas. 
No consumamos, el amor no es lo que dice la ajada letra occidental. Penetrar y ejercer, los dictados , la soga de la rutina.
Es un deleite de un cerebro perfumado dilatar la contienda, cuando el amor o el parecido se materializa.
Seamos a punto todo el tiempo.

jueves, 8 de septiembre de 2016

Gustavo celebra las condenas de La Perla, pero me dice que no nos olvidemos que ha empeorado la lucha por la liberación

No sé dónde tiraron los huesos de primo Gustavo, pero sé dónde vive: en mi corazón. Lo sé porque me lo agitaba estos días con el sentido de sus latidos. Después de cuarenta años los asesinos del gran centro de detención clandestino de Córdoba recibían por fin el definitivo castigo. No sé si los restos de mi primo Gustavo están en La Perla, en el Pozo de Banfield, de Quilmes, en la ex Esma, en el río… Me contestó con un tun tun en mi corazón que él vive igual en muchas memorias y que cada tanto sale a posarse sobre un ave que acaricia en la Plaza las cabezas de las Madres. Los 30 mil viven metidos en los corazones de muchos y no sé cómo hacen pero nos inyectan movilización cuando el horizonte se oscurece de renovados enemigos. Suben a veces a nuestra razón para que entendamos que no se puede ver de brazos caídos como la Patria vuelve a traficarse en una trata mugrienta, donde el pueblo queda condenado a la explotación. Gustavo y los 30 mil andan celebrando las condenas a los genocidas, pero apenas un rato, nos conmueven bombeando nuestros corazones para decirnos que se ganó una batalla pero que en la guerra por la liberación hubo reveses y que hay que alistarse nuevamente. Aún sin ellos, pero con ellos en el corazón.